Hacia el siglo XVIII las cañadas aledañas a San Carlos eran conocidas como “Las Acollaradas”, de acuerdo a la expresión campera, que reemplazaba al de Encadenadas. Éstas sirvieron de apoyo a las caravanas que iban a Salinas Grandes, y luego hicieron que a su vera naciera un pueblo-San Carlos de Bolívar-. Siglos después, la fauna y flora que allí se encontraban, sumado a ello sus aguas incentivó a generar un lugar de esparcimiento, de diversión y recreo: el parque Las Acollaradas.
Para nosotros acollarar es sinónimo de encadenar, de unión y lazos. De ahí que cada uno de nuestros pequeños emprendimiento se ha unido para ofrecer servicios, productos, actividades y cordialidad a los visitantes.